domingo, 24 de junio de 2007

Relatoría Sesión I; Junio 20 de 2007

ESCUELA DE FORMACIÓN ARTÍSTICA Y CULTURAL DE

BARRIOS UNIDOS, BOGOTÁ

DIPLOMADO LAS ARTES PLÁSTICAS COMO MANIFESTACIÓN HISTÓRICA EN COLOMBIA

PROTOCOLO

SESIÓN I Junio 20 de 2007

ANÁLISIS DE LA LECTURA:

EL ARTE Y LA VIOLENCIA COLOMBIANA EN LA SEGUNDA MITAD DEL SIGLO XX [1]

Una primera interpretación del texto, nos remite a episodios de violencia, la cual es plasmada desde las diferentes propuestas artísticas. Estas imágenes son las que sirven de recordatorio histórico, La tan necesaria memoria que nos permite volver al pasado.

Para el grupo de participantes del diplomado, es importante tener presente el periodo histórico, pues la historia de la violencia es al parecer escrita por los vencedores, en ese sentido el punto de vista del autor resulta fundamental, pues en sus obras se aprecia de un lado, la posibilidad de la objetividad, así como el interés de plasmar los hechos tal cual los han vivido. Es el caso de los sucesos del 9 de abril de 1948 en Bogotá, en donde el momento mueve a los artistas a plasmar los hechos como se vivieron.

En ese sentido vale la pena interrogarse acerca de lo universal que puede ser el lenguaje del arte y como se pueden superar las barreras de lo local, desde la narración plástica de los diferentes eventos. Desde esa mima perspectiva se plantea de que manera la fotografía contribuye en esa mirada, donde la técnica en ese caso gozaría de la cualidad que Cartier-Bresson denominara el Instante decisivo[2], esa fotografía que se ajusta al momento, que sin una planeación predeterminada logra capturar el espíritu de un evento, constituyéndose en un documento de importancia documental y para el caso que nos ocupa; la narración que constituye la memoria colectiva, es necesaria para la reconstrucción de esa historia nuestra, marcada por el signo de la violencia.

De otro lado se destaca la necesidad de abandonar la imagen del artista como aquel personaje romántico que solo se deja llevar por la sensibilidad, sino que el artista, debe ser una persona crítica, conocedora de unos aspectos técnicos, conceptuales, claro con una sensibilidad muy grande, pero capaz plasmar una idea con un sentido crítico. Puesto que hay muchas cosas que media la producción artística.




[1] MEDINA, Á. En Arte y Violencia en Colombia. Bogotá, 1999 MAMBO.

[2] Concepto desarrollado por el célebre fotógrafo Francés, que viene de las famosas "images a la sauvette", que vienen a significar con más precisión "imágenes a hurtadillas". Se trataba, pues, de poner la cabeza, el ojo y el corazón en el mismo momento en el que se desarrolla el clímax de una acción.

1 comentario:

Anónimo dijo...

El nombre del blog se derivó de un comentario de Diego dentro de éste texto, y de lo que dijo el día de la primera sesión de clase, respecto a que generalmente se tiene un conocimiento de la historia desde lo que nos dicen los vencedores, o tal vez, el establecimiento, por lo que cobra gran valor lo que nos puede decir el arte respecto a esa historia canónica y de manipulación de la opinión. Las Otras Historias, hace referencia a eso que no ha sido contado, o que si ha sido contado, está oculto, censurado o silenciado; en esa medida, el arte puede ser visto como un documento, a pesar de que no sea sólo eso sino muchas otras cosas. Aquí también relaciono otro de los comentarios que se dieron el la segunda sesión, respecto al imaginario que se tiene del artista como persona muy sensible, y cuyas acciones son motivadas por la sensibilidad; dicha imagen es parcial, y oculta las múltiples facetas de la creación artística, que de por sí no es solamente la acción que conlleva a un producto, sino todo lo que hay tras él, y las reflexiones y opiniones que genera: hay que sentir, pensar y actuar, sólo sintiendo no hay mayor trascendencia, pues el sentimiento va acompañado de otros actos que lo complementan, es más, ya pensaría que sentir, pensar y actuar, son la misma cosa, como para no caer en la manía de compartimentar todo… en ese sentido, concuerdo con la opinión de Diego, respecto a que hay que dejar a un lado esa imagen romántica del artista como inspirado… no, el artista es más que eso, y con el tema de la violencia nos hemos podido dar cuenta de ello.