miércoles, 15 de agosto de 2007

Francisco Salamanca ficosaa@hotmail.com

DARIO MORALES

Nacido en Cartagena en el año de 1944, y muerto en 1988. Realizó estudios en la escuela de Bellas Artes de Cartagena, en la Escuela de Bellas Artes de la Universidad Nacional de Colombia, y grabado en el Atelier 17 en Paris.
Desde el año de 1968 hiso exposiciones colectivas e individuales, entre las cuales podemos citar las siguientes; galería Belarca año 1971, Pyramid Galleries, Washington, D.C año 1972, Aberbach Fine Arts, Londres, año 1977, Aberbach Fine Arts, Nueva York en el año 1982, Retrospectiva, en el Museo de Arte Moderno de Bogotá, año 1984.
Dentro los premios y menciones recibidas, nombraremos las mas importantes; primer premio en la décima exposición Panamericana de Artes Gráficas de Cali Colombia, primer premio en el Salón Nacional de Artes Plásticas Jorge Tadeo Lozano, medalla Instituto Colombiano de Cultura (1986).
Hay obras suyas en los siguientes museos, Museo de Arte Moderno de Bogotá, Museo de Arte Moderno de la universidad Nacional, Museo de la tertulia de Cali, Corcoran Gallerie Washington D.C, Museum of Modern Art Munich, Metropolitan Museum and Art Center of Miami.
La mayoría de los críticos de arte lo ubican en el movimiento conocido como Nuevo Realismo, que se hizo popular en Colombia en los años 70, originado una década anterior en Estados Unidos. Eduardo Serrano a referirse a el nos enuncia las siguientes características; existe un énfasis realista (entendido por tal un cierto poder ilusionista), y su franca aceptación tanto de la precisión como de la distancia emocional. El gran crítico del arte Germán Rubiano al hablar de esta época, nos dice que en ella no existieron movimientos predominantes, sin novedades o verdaderos aportes, sino desarrollos de lo existente
Otro elemento a tener en cuenta al referirnos a este movimiento, es la utilización de la fotografía, pero este recurso no es uniforme en todos sus representantes, pues algunos trabajan directamente con fotografías, y otros solo se inspiran en ellas.
Una característica substancial y que marca un sello particular en su obra, es el tema recurrente en sus obras, el desnudo femenino, con un marcado erotismo, donde resalta la gran calidad en el dibujo, y un gran cuidado en las técnicas que utilizo, tanto en el dibujo, como en la escultura, y la pintura.
Darío no pretendió adscribirse a ninguna vanguardia, sino responder a una gran necesidad que le imponía su ser, pintar a la mujer, y talvez lograr responder a una corta pero difícil pregunta, que misterio lleva incito la mujer, quien es, que es, que hace que un cuerpo de mujer despierte en nosotros tantos sentimientos en nosotros, que provoca muchas veces mas interrogantes que respuestas en nosotros.


Bibliografía

1. SERRANO Eduardo, Cien años de arte colombiano 1886-1986, editorial Benjamín Villegas. Localización, biblioteca Luís Ángel Arango.
Este libro nos permite ubicar de forma clara al artista en la corriente artística en que se desarrollo, y las características más importantes de su expresión artística.
2. PEÑA Gloria, Panorama artístico colombiano, editorial arco, Bogotá Colombia 1981. Localización, biblioteca Luís Ángel Arango.
Este libro nos suministra sobre todo datos biográficos sobre el autor.
3. GIL TOVAR, Colombia en las artes, editorial biblioteca familiar de la presidencia de la república. Localización, biblioteca Luís Ángel Arango.
Nos aporta una concisa descripción del estilo del nuestro artista.

Técnicas, temática, y su tratamiento del cuerpo

El artista mencionado, discurre entre varias técnicas, el dibujo, la pintura, la escultura, grabado, pero todas encuentran un punto de encuentro, la mujer, el desnudo femenino, el cuerpo desde lo erótico, expuesto a la mirada del espectador, sin artilugios, pero fuerte y perturbador, colocado en espacios cerrados, y objetos cotidianos, que enfatizan el concepto de la modelo posando, y el artista plasmando lo que ve, temática presente en toda la historia del arte, el cuerpo como nos lo dice Francisco Otta ha sido la temática mas antigua y constante en la historia de las artes plásticas. En el se ven huellas de pintores del siglo 19, como Ingres, lo que nos muestra que su interés no estaba centrado en apuntarse a ninguna vanguardia, sino a desarrollar su propia visión. Pero este cuerpo es colocado en ambientes cotidianos, con lo que se enfatiza lo íntimo, y para dejar claro esta última característica, diremos lo que nuestro autor menciono en una entrevista con García Márquez “lo que yo quiero expresar siempre es lago muy íntimo. Y eso se da siempre en cuartos cerrados en los espacios domésticos de la intimidad. Yo creo que esos sentimientos son los mas universales.
Pero los desnudos de Darío Morales no son simples representaciones del cuerpo femenino, este cuerpo no es un frió testimonio orgánico, sino que lleva vida dentro de si, y no solo esto, hay algo que el artista deja de si, como ocurre en toda obra artística, pues tanto el objeto representado, como la mirada de quien lo representa, construyen una realidad que llamaremos obra de arte, esto nos queda claro en las propias palabras del autor, que citaremos textualmente a continuación “ lo que yo aspiro no es copiar la propia realidad, sino traspasarla, recrearla, hasta lograr quede de ella brote vida”
La mirada hacia lo íntimo, al abrir una puerta y encontrar sorprendido un bello cuerpo de mujer, entrar en ese espacio, en ese jardín interior oculto, el que a veces solo conocemos nosotros mismos, o unos pocos.
Pero que quiere hacer Morales con un desnudo, la repuesta nos la da el mismo autor, “al hacer un desnudo lo que quiero realmente es acariciarlo, jugar con sus formas, poseerlo”, nos presenta con esta respuesta una posición lúdica, de gozo ante el cuerpo femenino. Es evidente que deben existir razones de peso para que Darío durante todo su transcurso artístico, no hubiese abandonado esta temática, y la forma de tratarla, debe existir una razón de gran peso.
Estas dos últimas frases del artistas nos pueden hacer entender en parte el porque de su obra, la primera “siempre quise tener a mi lado una mujer “y la otra “ siempre miro con amor su cuerpo desnudo”.


Obras.

Escogí este autor, que aunque no fue mencionado mucho en el diplomado, ni al movimiento al que perteneció el hiperrealismo, o nuevo realismo responde mucho a mis preferencias en cuanto al arte.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Yo tengo mis dudas respecto a la riqueza de la obra de Morales como obra de arte, pues la asimilo más a una obra gráfica de altas calidades; al verla como obra de arte, no tengo mucho que decir, mientras que bajo la perspectiva de obra gráfica, el terreno se abre a la discusión. Los trabajos de Morales vistos bajo la perspectiva de obras de arte, así como sucede con Fernando Botero, Nadin Ospina o Maripaz Jaramillo, no son muy interesantes, son más bien pobres, no avanzan, no cambian, se casan con una fórmula formal y temática, y por lo tanto, cancelan la dinámica de cambio inherente a la obra de arte. Lo anterior, al menos en el caso de Morales, no va en detrimento de sus trabajos, sólo que los sitúa en otra categoría, desde la cual se pueden estudiar con sed investigativa y permitiendo la existencia de terrenos para el análisis y la discusión.